Los toros dan y quitan

DESCONOCIDO MUERTO EN GAUCÍN A PRINCIPIOS DE LOS 80´s

DESCONOCIDO MUERTO EN GAUCÍN A PRINCIPIOS DE LOS 80´s

Refieren en un artículo ingles: “Corriendo con los toros en Andalucía”, publicado por el diario: “The Guardian”,  del sábado 23 de abril de 2011 (Joshua Bullock), que hace 30 años en estas fiestas de toros de pascua en Gaucín (provincia de Málaga, España), un anciano dejó su puerta entreabierta, por la que entró un toro que corrían, y lo mato en el cuarto del frente.
Fuente:
http://www.guardian.co.uk/travel/2011/apr/23/andalucia-village-easter-festival-bulls

Gaucín es el primer pueblo de la Serranía de Ronda que se encuentra en la carretera que une el Campo de Gibraltar con la Ciudad del Tajo. Muchos historiadores creen que Gaucín es de origen romano, aunque no existan datos que puedan confirmarlo y además, no se conoce que haya tenido otro nombre que el actual, de claro origen árabe, como su calle más antigua, construida a la sombra de un viejo castillo del Águila, con su morisco nombre de Arrabalete. El pueblo está situado en la vaguada que la Sierra del Hacho, bajo el castillo, que tuvo un gran valor estratégico ya que con Gibraltar, constituía la defensa de la entrada por el Sur. Construido por los romanos, fueron los árabes quienes dejaron más huellas en el recinto, que conserva su pureza arquitectónica, de la que se deduce la importancia que dieron a este baluarte, al que dotaron de las poderosas defensas hasta hacerlo inexpugnable. El 17 de septiembre de 1309, murió luchando contra los musulmanes en las inmediaciones del castillo del Águila, en los Prados de León, don Alfonso Pérez de Guzmán, señor de Niebla, Nebrija y San Lucar de Barrameda, llamado “Guzmán el Bueno”. Único dato fidedigno hasta que se produce la conquista por los Reyes Católicos el 27 de mayo de 1485. En la villa permanecieron los musulmanes que quisieron con sus propiedades, pero en 1488 el rey don Fernando el Católico dejó en el pueblo de Gaucín una respetable guarnición, mas los habitantes cansados del señorío de los cristianos, se confederaron entre sí y mataron a los soldados. No les duró mucho la alegría, pues los moros comarcanos, para hacer ver que no tenían parte en este hecho y por temor de ser castigados, se reunieron y cercaron Gaucín: acudieron con nuevas gentes de Sevilla el marqués de Cádiz y el conde de Cifuentes y recobrado que hubieron la plaza, hicieron esclavos a todos los que no pasaron a cuchillo. También destaca otro hecho sangriento que ocurrió en la quinta invasión del pueblo por las tropas napoleónicas, de las seis que hicieron, el 8 de julio de 1810, asesinaron a todos los habitantes que se encontraron a su paso, quemando los archivos municipales y parroquiales pese a que don Antonio de Molina y Navarro, con 20 hombres, desafió heroicamente  a los invasores. El monumento más importante que posee el pueblo es sin duda el mencionado castillo del Águila, actualmente en ruinas (El castillo del Águila fue construido por los romanos. En el año 914, durante la campaña contra Belda (Gaucín), los vecinos de esta Villa presenciaron desde el castillo la quema de las naves de Umar ben Hafsum, en Algeciras. Abd al Yabbar, hijo del Al-Mutamid, conquistó el castillo de Gauyan (Gaucín) en el siglo XI.); tampoco pueden pasar desapercibidas las rejas de balcones y ventanas, muchas de ellas fabricadas en los siglos XVI y XVII.
Fuente:
http://www.pueblos-espana.org/andalucia/malaga/gaucin/
http://www.castillosnet.org/programs/castillosnet.php?tip=inf&dat=malaga/MA-CAS-005

Al parecer éste el único incidente mortal, en encierros de toros, que se tenga memoria en este antiguo poblado, que ha digerido en el transcurso de los siglos, quizá, demasiadas matanzas para ser un poblado tan chico, y sea por ello prolijo en historias de ultratumba y en animas en pena, que sin duda, siguen clamando por justicia, o al menos, para que trascienda su historia, pero la memoria de los vivos no alcanza siquiera para recordarnos el nombre del difunto que mató un toro en los años ochenta, menos para dar cuenta de las incontables muertes que se dieron en sus múltiples contiendas bélicas y actos de de barbarie.