“La suerte suprema”

Dumitru Felciuc

Ganadero español fallecido en 1913 a consecuencia de una caída de caballo cuando embarcaba una corrida de su divisa en la población de Soto Gutiérrez. Don Esteban Hernández compró en 1890 a don Alejandro Arroyo reses oriundas de Pedraja que aumentó con otras de Jacinto Mazpule. Buscaba la fiereza en sus productos y se presentó en Madrid el 20 de mayo de 1894; fue una de las ganaderías más importantes del siglo XX y a sus toros los llamaban los “Pabloromeros” de Madrid.
Las reses pastaban en las fincas de Cuarto Carretero, Dehesa de Guadalíx, Prado Herrero, Soto Gutiérrez y el Parral, ubicadas en los términos de Ciempozuelos, San Martín de la Vega y Guadalíx; llegó a juntar más de 1.500 cabezas. Contrajo nupcias con doña Luisa Plá,  misma que siendo viuda de Hernández, se casó en segundas nupcias con el doctor Agustín Mascarell, renombrado cirujano taurino, aquél a quien Joselito reclamaba cuando era llevado a la enfermería el día trágico de su cogida en Talavera de la Reina, y quien en adelante se encargaría del cuidado y dirección de la ganadería de la viuda de don Esteban Hernández Martínez.
Fuente: Con información de/ Don Víctor TBC/ http://alostoros.blogsome.com

Foto: De la colección de Rafael Cabrera

El viernes 25 de octubre de 2013, publicaron en el Blog en Internet "Toro, Torero y Afición", una editorial sobre la ganadería de Esteban Hernández, donde refieren que.- La ganadería de don Esteban Hernández Martínez procedía del Raso de Portillo, a lo que se añadió ganado de María Luisa Zapata. Finalmente el ganadero acabó desechando lo de procedencia castellana, quedándose con lo Vazqueño, a lo que añadió reses de Trespalacios. Les llamaban 'los Pabloromeros de Madrid'. Don Esteban murió a causa de una caída del caballo embarcando una corrida para Madrid. La ganadería fue desgraciadamente extinguida a tiros por el Frente Popular. Sus nietos son los Hernández Pla, que tan buenos toros han echado en Madrid, entre ellos "Capitán", cuya pelea en varas se recogía en esta bitácora hace unos días. Sin embargo el encaste de lo de Hernández Pla era Santacoloma, pues lo otro se extinguió, aunque les permitieron mantener los derechos de hierro, divisa y antigüedad en honor a la vieja historia de la casa. Es fama que las últimas vacas de don Esteban fueron tiroteadas por el solo placer de acabar con ellas.
Fuente:
http://torear.blogspot.mx/2013/10/sobre-la-ganaderia-de-esteban-hernandez.html