Los toros dan y quitan

ANTONIO MEJÍAS BIENVENIDA (1922 - 1975)

ANTONIO MEJÍAS BIENVENIDA

Antonio Bienvenida y el erudito taurino don José María de Cossío

El más famoso y con mayor número de años en activo de los descendientes de Manuel Mejías Rapela. Nació el 25 de junio de 1922 en Caracas (Venezuela) y tomó la alternativa en Madrid, el 9 de abril de 1942, mano a mano con Pepe Bienvenida y toros de Miura. Don José María de Cossío describe así el toreo de don Antonio: "Busca su puesto en la aparente ligereza sevillana, pero con un matiz de melancolía que no llega al patetismo. Esta negativa a conducir su arte por los escapes que pudiéramos llamar románticos del arte de torear caracteriza su toreo y le da pleno derecho a la consideración de clásico, de maestro clásico de su arte". De ello dio fe en las más de 800 corridas toreadas y en los más de 1.600 toros que cayeron bajo su espada. El 16 de junio de 1960 intentó la hazaña de matar 12 toros de distintas ganaderías, seis por la tarde y seis en corrida nocturna, viéndose obligado a desistir después de que doblara el noveno. Se retiró definitivamente en la plaza madrileña de Vista Alegre, el 5 de octubre de 1974. Tentando unas vaquillas en la finca “Puerta Verde”, de Amelia Pérez-Tabernero, sita en San Lorenzo de El Escorial (Madrid), el 5 de octubre de 1975, una de ellas, de nombre “Conocida”, de pelo negro, nº 7, con unos 300 kilos de peso, se quedó pegada a la puerta de salida, y cuando se abrió de nuevo para soltar a la siguiente, regresó a la placita, con tan mala fortuna que no la vio el diestro, que estaba de espaldas. Hizo la infausta por él y sufrió una aparatosa voltereta, que le produjo lesiones irreversibles en las vértebras cervicales a consecuencia de las cuales falleció el 7 de noviembre de 1975. (Fuente: Crónica de d. Juan José Zaldívar Ortega, de su obra “Víctimas del Toreo”)

Al respecto de su inesperada muerte, el erudito Juan José de Bonifaz Ybarra, refiere que << lejos de una repleta plaza de toros en tarde de sol y feria, habría de encontrar un insospechado y trágico fin el veterano maestro Antonio Mejías Jiménez, quien, al igual que sus familiares, honró el apodo de “Bienvenida”. Retirado definitivamente de la arriesgada aventura torera, en la que siempre ocupó un puesto relevante, el 5 de octubre de 1974 en el coso madrileño de Vista Alegre, parecía haberse alejado, de por vida, del peligro de las cornadas. En la mañana del 4 de octubre de 1975 se desplaza, en unión de su hermano Ángel Luis y de su sobrino Miguel – quien por entonces soñaba reverdecer las viejas glorias taurinas de su linaje- , a la finca que en el término municipal de El Escorial posee la ganadera Amelia Pérez-Tabernero. Allí torea unas vaquillas impartiendo su postrera lección magistral , cuando una de ellas, “Conocida”, retorna a la placita de tienta, al ser su puerta abierta para dar salida a la siguiente res, y embiste por la espalda a Antonio, que no la ha visto, y lo lanza al aire, con tan mala fortuna que al caer en mala posición se producen irreparables lesiones en las vértebras, que ocasionaron el fallecimiento del antiguo espada en la tarde del siguiente día 7 de octubre de 1975 en la Residencia Sanitaria de La Paz, de Madrid. Un monumento instalado cerca de la puerta grande del madrileño coso de Las Ventas, por la que tantas ocasiones salió en vida y una vez muerto, recordarán a las generaciones venideras las calidades, profesionales y humanas, de esta gloria de la torería. "

El padre de la afamada vaquilla asesina de nombre "Conocida" que causó la muerte del inolvidable diestro Antonio Bienvenida el 7 de noviembre de 1975 se llamaba "Navajito", un encastado y noble toro negro de Amelia Pérez Tabernero, lidiado e indultado en Segovia el 29 de junio de 1968.
Fuente:
http://aportagayola.wordpress.com/el-toro/toros-famosos/