Los toros dan y quitan

CÉSAR ANTONIO GIRÓN DÍAZ (1933 - 1971)

CÉSAR ANTONIO GIRÓN DÍAZ

“César Girón” en la Plaza de Toros de Vinarós

Foto cortesía de las colecciones de Sebastiá Redó y Alfred Gómez

De acuerdo con muchos ha sido uno de los más grandes toreros venezolanos de todos los tiempos. Nació en  Caracas Venezuela (en el sector  Roca Tarpeya, una colina desde donde se observa  Caracas centro  y  una parte  de la zona  de El Valle), el 13 de junio de 1933, fueron sus padres Carlos Girón y Esperanza Díaz. En Maracay le tocó vivir una vida de precariedades junto a sus 12 hermanos, de los cuales 4 más llegaron a ser matadores de toros: Rafael, Francisco, Efraín y Freddy, otro hermano José Luis (Pepe Luis)  fue novillero  de  buenas actuaciones, sin llegar  a coronar  en la alternativa. Debido a la pobreza de su familia, de niño tuvo que ayudar a su madre en una venta callejera de comestibles y su padre en diversas actividades. Uno de los oficios más curiosos que le tocó realizar fue el de guía en el cementerio y limpiador de tumbas. Siendo muy joven rescató a su familia de un incendio que se produjo en el rancho en el que vivían en la calle Sánchez Carrero de Maracay. A partir de esta experiencia le llamaron "Mano Quemá", debido a las quemaduras que sufrió en sus manos, las cuales le quedaron marcadas por heridas profundas por mucho tiempo. El deseo de ser torero nació el día en que presenció en la maestranza de Maracay, al famoso matador "Manolete". Su carrera taurina la inició en 1945, al lanzarse al ruedo de la plaza de toros de Maracay durante la actuación de la cuadrilla infantil mexicana “Los Chicos de Querétaro”. Su primer gran triunfo como torero se produjo el 1 de octubre de 1950, al tener una actuación memorable en una novillada criolla celebrada en el Nuevo Circo de Caracas, al matar 6 ejemplares por un percance sufrido por su alternante Moreno Sánchez. Sánchez era la estrella del espectáculo, por ser el alumno preferido de Pedro Pineda y César Girón iba contra él porque se había ganado la inclusión por sus triunfos previos en Valencia y Maracay. En definitiva, a partir de esta memorable tarde, Girón se convirtió en un héroe, siendo paseado por las calles de Caracas y llevado hasta las redacciones de los diarios más importantes de la época; en lo que sería sólo el inicio del camino para numerosos éxitos en las principales plazas taurinas del mundo. En 1951, viajó a España donde consiguió la consagración como matador. El 29 de septiembre de 1952, recibió la alternativa de manos de Carlos Arruza “El Ciclón Mexicano” en la Monumental de Barcelona. Posteriormente, alcanzó el primer lugar en el escalafón de corridas realizadas en las temporadas de 1954 y 1956. Aunque se retiró en Caracas en 1966, al poco tiempo anunció su regreso al mundo taurino como matador y empresario de corridas. Su última tarde triunfal se produjo en la Plaza Monumental de Valencia (Edo. Carabobo) en 1971, donde le tocó alternar con los toreros Antonio Bienvenida y Luis Miguel Dominguín. El 19 de octubre de 1971, se produjo su muerte en un accidente automovilístico en la autopista Caracas-Maracay. César Girón ha sido considerado como uno de los más importantes toreros del siglo XX. Como expresión de tal afirmación, tenemos que un pase taurino, creado por él, lleva en su honor el nombre de "girondina". (Fuentes: Don Nilson Guerra Zambrano, historiador taurino de Venezuela y página web: Venezuelatuya.com)