EDUARDO ALBASANZ "BONIFA " (XXXX - 1928)
Refiere don Gonzalo Gil González en uno de sus muy brillantes trabajos taurinos, que << Eduardo Albasanz “Bonifa” fue desgraciadamente un torero sin suerte, cuyo revés de fortuna empezó el 29 de junio de 1923, cuando en la novillada de la plaza de Soria, sufrió la cogida de un novillo que le causo una lesión en la región inguinal y un varetazo en el pecho. A resultas de la cogida se le presentó una hernia a pocos años, y a causa del golpe en el pecho sufrió un hundimiento en el tórax que le ocasionó problemas respiratorios muy posiblemente causados por el mal soldado de alguna costilla que le lesionó un pulmón. A poco tiempo después, una tarde de 1926, toreando en Jadraque (Guadalajara), el primer toro lo empujó contra la barrera, golpeándose fuertemente en el costado. Dentro de su pecho algo debió romperse porque se le agudizaron sus problemas respiratorios y jamás recobró su fuerza ni su entereza. Dos años más tarde fallecía en su casa a resultas de todo esto, sin más aplauso ni consuelo que los bondadosos cuidados de su familia, a la que dejó en la ruina. Josefina Villaplana, quien era su hijastra, se refería así del torero después de su muerte: << Mi pobre padrastro, después de torear cuarenta años, todo lo que nos pudo dejar fueron 1000 pesetas que daba la sociedad cuando el murió." A Dios gracias al menos tuvieron eso para llevarse un pan a la boca , gracias a que el previsor “Bonifa”, fue el segundo afiliado después que el exitoso Ricardo Torres Reina “Bombita” tuvo el acierto y virtud de fundar la Asociación Benéfica de Auxilios Mutuos de Toreros, y no olvidarse nunca de los lidiadores modestos." Que paradójico me resulta este final amargo, contra aquel agosto de 1898, cuando en Atienza de los Juglares, se dan a conocer los programas de las fiestas de septiembre: << Solemnes fiestas religiosas. Fuegos artificiales dirigidos por el acreditado pirotécnico Anastasio Sánchez, de Madrid; divertidos juegos de cucañas, iluminaciones y dos corridas de toros, los días 15 y 16, con toros de Gregorio Aguado de San Sebastián de los Reyes, corriendo la lidia a cargo del simpático novillero Eduardo Albasanz “Bonifa” "… fulgurando como una estrella.