Picador que sufrió una cogida en la Plaza Vieja de Albacete el 9 de septiembre de 1913 muriendo a consecuencia de las heridas al día siguiente en el Hotel España.

Su epitafio en el cementerio de Albacete España reza doliente: Juan Bautista Santonja Rasón. Falleció el día 10 de  septiembre de 1913. La viuda del que aquí descansa eternamente y sus desconsolados hijos suplican en caridad una oración para el finado.

El cronista, don Juan José Zaldívar Ortega, refiere que << Bautista Santonja Rasón (Artillero), picador de toros, natural de Bocairente (Valencia), donde nació el 18 de febrero de 1878. El 9 de septiembre de 1913 picó en Albacete, y al poner una vara al primer toro, del duque de Veragua XV, fue derribado y se clavo en el vientre la perilla de la montura. Se retiró a la enfermería conmocionado, y el 10 de septiembre de 1913 dejó de existir. "

Por su parte,  el erudito taurino español, don Juan José de Bonifaz Ybarra, en su obra “Víctimas de la Fiesta”, lo menciona con apellido distinto al precedente,  al citar que << BAUTISTA SANTONJA BARÓN (ARTILLERO) llegó a formar en la plantilla de Vicente Pastor, tras una excursión por tierras mexicanas. Interviene en un festejo que tuvo por marco la plaza de Albacete el 9 de septiembre de 1913, donde una res de la vacada del duque de Veragua al derribar a la cabalgadura le produce lesiones internas en el vientre, de las que fallecería el día siguiente, 10 de septiembre de 1913. "

Cortesía de
http://gestauro.blogspot.mx/2014/09/juan-bautista-santoja-rason-el-artillero.html

Por su parte, don José Antonio Román Romero, el historiador contemporáneo que mantiene en la Red el visitado Blog taurino: "De Hombres, Toros y Caballos", refiere de este personaje de la fiesta, que al caer, después de poner una vara al primer toro de Veragua en la corrida que se celebró en Albacete el día 9 de Septiembre de 1913, la llamada perilla de la montura le oprimió el bajo vientre, causándole tan grave lesión, que a consecuencia de ella se presentó la peritonitis y falleció antes de las veinticuatro horas. Los compañeros de Bautista Sántonja, y muy especialmente Francisco Codes "Melones", no se separaron un instante de el atirante la noche del 9 y la mañana del 10 de septiembre de 1913.

La hora de celebrar la segunda corrida se aproximaba, y cuando se preparaba el referido "Melones" a vestirse, tuvo que sostener en sus brazos a Bautista, que sufrió un colapso, hasta que auxilió al herido un ayudante del médico. Pasado aquel terrible momento, y cuando ya tenía la faja puesta el compañero, otro colapso más fuerte privó de la vida para siempre al que hasta veinticuatro horas antes era hombre joven, sano, vigoroso y fuerte. Aquellos hombres, que no habían dormido, que habían visto sufrir horriblemente y expirar a su compañero, después de besar su cadáver, se vieron obligados a salir de nuevo a no saber si al día siguiente habría que borrar otro nombre de la lista. Hay que convenir en que la vida del torero es distinta a la de otros hombres, y en casos así pierden la serenidad de ánimo, y un movimiento mal hecho suele valerles un insulto o algo grave hasta para sus ascendientes. El desgraciado Bautista Sántonja era natural de Bocairente, donde nació en 1880, contaba pues treinta y tres años de edad, y desde niño residía en Córdoba, donde trabajo desde pequeño.