Los toros dan y quitan

EDUARDO MARGELI CURCÓ << GADITANO >> (XXXX - 1936)

EDUARDO MARGELI CURCÓ   << GADITANO >>

Eduardo Margeli (Gaditano)
Cortesía del historiador hispano zacatecano
Don Juan José Zaldívar Ortega

Eduardo Margeli, apodado “Gaditano”, fue un banderillero, nacido, lógicamente en Cádiz, a principios de la tercera parte del siglo XIX, que llegó a México siendo muy joven, para dedicarse a su primer oficio, el de carpintero; pero una vez aquí -según cuenta la leyenda que, tras haber presenciado una corrida en la San Pedro-, se aficionó al toreo hasta el extremo de abandonar su profesión para dedicarse a la nueva que le solicitaba. Se presentó en la Plaza de Toros de la Ciudad de México el (26-03-1899) y después llegó a colocarse entre los mejores. La tarde del día (14-10-1900), un toro de la  ganadería mexicana de Santín, de pelaje castaño, aldinegro, cornalón y con seis años de edad, le empaló al entrar a banderillear, infringiéndole una cornada profunda en el hipocondrio izquierdo. Desde entonces dejó de torear y se dedicó a representar a sus paisanos, que venían a México. Fue por ello que, en esa especialidad, en la que demostró notable competencia; si bien, muchos diestros archivaron de él desagradables recuerdos de sus gestiones. Se le vio mucho en la Ciudad de Zacatecas, hospedándose en los modestos hoteles de la Capital y, al parecer, fue consejero taurino influyente en las empresas de la Plaza de Toros San Pedro, durante más de treinta años. El 21 de septiembre de 1936, un novillero mexicano, apodado “Popoca”, disgustado con Eduardo Margeli por diferencias existentes entre ellos, preferentemente por incumplirle en varias ocasiones, entre ellas la de no incluirle en un cartel novilleril, lo asesinó en su propio despacho de la Empresa. Fue su sino -igual hubiese muerto en España durante la Guerra Civil- o la contribución que pagó por ser «árbitro de los negocios taurinos de México, en todas sus derivaciones», algunos de los cuales debieron ser deshonestos.
Fuente:
Crónica de don Juan José Zaldívar Ortega
http://www.fiestabrava.es/pdfs/SANP-3.pdf

Refiere el acreditado cronista taurino Xavier González Fisher, en su visitado sitio taurino en la Internet: "La Aldea de Tauro", que don Eduardo Margeli Curcó "el Gaditano", empresario taurino, en conjunto con Manuel Martínez Feria, presentaron a la "Cuadrilla Juvenil Mexicana" en plazas europeas en la temporada de 1909. Tuvo durante varios años a su cargo la plaza El Toreo y junto con Antonio Casillas "el Berrendo", fue propietario de la ganadería de Malpaso. El 21 de septiembre de 1936 fue herido a tiros por el novillero Antonio Popoca, quien le reclamaba un puesto en una novillada. A causa de las lesiones sufridas, falleció 5 días después.
Fuente:
http://laaldeadetauro.blogspot.com/2010_06_01_archive.html

En las efemérides de la afamada página taurina: "Suerte Matador" del 21 de septiembre de 1936, refieren que <<el novillero Antonio Popoca hiere mortalmente, de dos tiros, en su despacho ubicado en la calle de Meave, número 24, en el centro de la ciudad de México, al empresario taurino Eduardo Margeli Curco, debido a que se negaba a ponerlo en una novillada y porque lo corrió de su oficina. Fallecería cinco días después. >>

El día 15 de abril de 2015, recibí una amable carta del Sr. Juan Carlos Popoca Muñoz, nieto de don Antonio Popoca Medina, donde me cuenta, en descargo de las acusaciones que injustamente hace la historia de los supuestos actos delictivos su abuelo, que: "Lamentablemente y debido al poder económico del Sr. Margeli se le puso como víctima. La prueba del no homicidio es que el Sr. Antonio Popoca Medina jamás fue encarcelado. Ante las autoridades se logro comprobar su inocencia al encontrar que la pistola era de Eduardo Margeli. En aquella época no había dictámenes forenses precisos, pero corre la versión en los bajos mundos del toreo, que el Sr Margeli se aprovechaba de los novilleros. Lo único que puedo probar de la inocencia de mi abuelo es el no encarcelamiento del mismo por ese supuesto delito a pesar de no contar con recursos económicos como los que tenía el Sr. Margeli. El día 21 septiembre efectivamente Antonio Popoca Medina fue a ver a Margeli. Quería que le devolviera el dinero que le había cobrado el empresario por aparecer en un cartel que finalmente se canceló. Margeli y él empezaron a discutir, por lo que el empresario saco de su escritorio una pistola y tras apuntar con el arma y amenazar de muerte al novillero, este último se fue sobre el empresario y hubo una pelea donde se disparo la pistola hiriendo al empresario de muerte. El novillero por obvias razones salió corriendo de ahí. Gente de Margeli dio el aviso a la policía. Después de las investigaciones se determino que el novillero jamás accionó el arma, por lo que se le dejo en libertad. Margeli cobraba bastante dinero para que los novilleros destacaran. Era un hombre poco apreciado. Sin embargo su dinero y posición lo volvieron víctima.

Asimismo le comento, que a él no lo apodaban "Popoca", sino que ése era su apellido... nuestro apellido. A él se le conocía como "Don Gastón", o simplemente "Gastón".

Mi abuelo fue una persona muy querida en el ambiente. Posteriormente se fue a vivir a Caracas, Venezuela, donde estuvo en la inauguración de la Plaza de Toros “El Nuevo Circo” en las últimas corridas antes de que se cerrara. Don Antonio Popoca falleció en Caracas de un ataque al corazón. Jamás pudo tener la alternativa, sin embargo siempre se entrego con bravura... algo torpe, de arropon brusco, peleonero con el bicho.

Mi padre Don Antonio Popoca Romero, que aun vive, puede relatarle miles de historias al pie del callejón del antiguo torero; no lo que está en los libros, sino... la realidad. El fue el primogénito de Don Gastón."

En abundamiento del devenir de este desafortunado novillero consulte el Blog taurino "A los Toros" del historiador Rafael Gómez Lozano:
http://torerosmexicanos.blogspot.mx/search/label/Antonio%20Popoca